¡AMIGOS A LA FIESTA!

Dicen que en el corazón y en el alma quedan guardados los mejores recuerdos. Cualquier persona tiene en su interior metidos millones de recuerdos y cada día, afloran a la memoria más y más. A veces somos presas de los recuerdos y nos anclamos en ellos pero otras, son ellos los que nos incitan a pensar que seguimos viviendo y podemos contarlo.

Ayer fue una noche mágica, llena de encanto y de glamour; un halo especial se respiraba en el ambiente de la fiesta. Un grupo de amigos, muy especial todo él como grupo, de hace treinta y tantos años nos reuníamos para celebrar la Navidad y festejar el nuevo año. En realidad no eran unos simples amigos sino más bien, los amigos de toda la vida. 

Por un momento retrocedí en el tiempo, volví al pasado mientas los fotogramas se agolpaban y se acumulaban en mi mente. Era una serie interminable de imágenes secuenciales, pequeños trozos en blanco y negro que volvían a resurgir de nuevo; es como si de repente se reviviesen recuerdos de la juventud, se repitiesen escenas idénticas o al menos muy parecidas a las vividas hace treinta años. 

Los abrazos, los besos, los mismos olores y sabores de antaño, las mismas miradas de complicidad entre los invitados al festín...Parecía un sueño, un conjunto de anhelos encontrados que se buscaban desde hace tiempo y ayer, se rencontraron otra vez más.

En muchas ocasiones no hicieron falta las palabras, un simple gesto, un roce en los labios o apretón de manos eran suficientes para contemplar una vez, ese paisaje de ensueño, ese cuadro hecho a base de pinceladas impresionistas de múltiples colores y tonalidades..

Desenfreno en la pista, no parar de bailar y cantar, palabras y susurros al oído, miradas sensuales...un sinfín de sensaciones, sentimientos y pensamientos entre los asistentes que muchos pasaban desapercibidos o tal vez, fueran inconscientes para los interesados pero totalmente conscientes para un mero observador y más, con una cámara en la mano.

El año 2013 había comenzado repleto de buenos deseos, de anhelos de muchos que, quién sabe si se harían realidad, reencuentros de amigos que nunca se dejarán y siempre permanecerán juntos, compartiendo experiencias y motivos para seguir viviendo.